Después de pasar por Málaga, la exposición ‘Cuevas Turísticas de España’ permanecerá en Santander hasta el próximo 28 de marzo, ofreciendo a sus visitantes una muestra fotográfica de las principales cavidades de la península. La exposición, promovida por la ACTE (Asociación de Cuevas Turísticas Españolas), pretende impulsar el turismo subterráneo, muy importante en países como Estados Unidos, Francia o China.
La muestra cuenta con fotografías de las 35 cuevas españolas que forman parte de la ACTE, todas ellas con un gran interés geológico y con excelentes muestras de pinturas prehistóricas. Entre ellas destacan, además de Altamira, el resto de cuevas de la cornisa cantábrica, declaradas Patrimonio de la Humanidad el pasado mes de julio: la Cueva de Chufín, El Soplao, Hornos de la Peña, Monte Castillo, El Pendo, La Garma y Covalanas, en Cantabria; Tito Bustillo, Candamo, La Covaciella, Llonín y Pindal, en Asturias; y Altxerri, Ekain y Santimamiñe, en el Pais Vasco. Todas ellas cuentan con magníficas manifestaciones de arte rupestre, la primera gran representación artística de la humanidad, en la que predominan las figuras de animales como bisontes, caballos, ciervos, renos o toros.
En la exposición también podrá contemplar la riqueza arqueológica y geológica de las cavidades de Andalucía, Baleares, Canarias, Castilla y León, Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia, Madrid y Navarra, así como admirar una selección de piezas de ámbar de El Soplao, extraídas del yacimiento de ámbar del Cretácico más importante del mundo y que se encuentra en las proximidades de está cueva cántabra. El yacimiento, originado hace más de 110 millones de años por un paleoincencio, cuenta con una gran abundancia de piezas de color azul-púrpura con insectos fosilizados en su interior, que se exponen al público por primera vez en la exposición ‘Cuevas Turísticas de España’.
Esta exposición forma parte de la intención de ACTE de dar a conocer al gran público el Patrimonio Subterráneo español, uno de los recursos turísticos más importantes del país, y que ya llevan promocionando varios años con Cuevatur. En estos congresos, celebrados en diferentes comunidades autónomas, se dan cita numerosas empresas, espeleólogos, científicos e instituciones con el objetivo de mostrar el gran potencial que tiene el turismo subterráneo.
La Cueva del Pindal se sitúa en las proximidades de la localidad de Pimiango (concejo de Ribadedeva), en el Oriente del Principado de Asturias, muy cerca del límite con Cantabria. Posee una planta lineal en la que se disntinguen dos sectores : el oriental abierto al público y el occidental, de acceso restringido. Esta cueva posee unas pinturas rupestres conocidas ya desde 1908. Está incluida en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco desde julio de 2008, dentro del sitio «Cueva de Altamira y arte rupestre paleolítico del Norte de España» (en inglés, Cave of Altamira and Paleolithic Cave Art of Northern Spain).
Geología
El sustrato geológico del entorno data del Paleozoico, encontrándose rocas cuarcíticas de la Formación Barrios (Ordovicico), la sucesión detrítica de la Formación Ermita (Devónico) y las formaciones carbonatadas de la Caliza de Alba y Caliza de Barcaliente, sobre la cual se desarrolla todo el complejo kárstico.
Geomorfología
La geomorfología del entorno de la cueva resulta de la actuación de procesos:
1) Litorales.- Se observan dos antiguas plataformas de abrasión emergidas por procesos tectónicos y/o descenso del mar que son la Rasa II de Pimiango (160 m), situada al norte y que se asienta sobre la Cuarcita de Barrios; y la Rasa I (50 m), situada al sur, que se asienta sobre la Caliza de Barcaliente.
2) Torrenciales.- Que han originado la aparición de cuencas y abanicos torrenciales en el frente norte de la Rasa II de Pimiango.
3) De gravedad.- Depósitos de gravedad (caída de rocas mas reptación) que han originado derrubios en las laderas de las cuencas torrenciales y en la zona del frente de la Rasa II de Pimiango.
4) Kársticos.- Dolinas, rellenos de materiales insolubles de la caliza y un valle ciego formado por coalescencia de varias dolinas sobre la Rasa I de Pimiango, bajo la cual se ubica la cueva.
La existencia de anisotropias (diaclasas, fallas) favorece a la infiltración de las aguas superficiales y de los cauces próximos, que juntas forman aguas agresivas que disuelven las rocas de litología carbonatada, generando así cuevas subterraneas.
La Cueva del Pindal se caracteriza principalmente por desarrollar formas fluviokársticas (destacando roof pendants), de gravedad (destacando los depósitos de colapso) y de precipitación química así como gran cantidad de espeleotemas (estalactitas, estalagmitas y columnas).
Pinturas rupestres
La mayoría de las representaciones están situadas en los paneles de la derecha de la cueva. Se han documentado en diferentes investigaciones la existencia de 13 bisontes, 8 caballos, una cierva, un ciervo y unas astas aisladas, un mamut y otras figuras no reconocibles.
Existen también abundantes signos de color rojo como puntos, trazos, trazos paralelos y figuras claviformes.
Tan interesantisima como son siempre, todas tus entradas. Aprendemos muchisimo.
ResponderEliminarGracias, es un placer seguirte.
He visto el video de la cueva con mis nietos y estaban con unos ojos inmensos, sobre todo pensando que llevaban paracaidas y haciendo sus cabalas.
un abrazo,